REGALANDO TRADICIONES... MISAS DE AGUINALDO. “Dulce Jesús mío, mi Niño adorado, ven a nuestras almas, ven no tardes tanto”

REGALANDO TRADICIONES... MISAS DE AGUINALDO.

“Dulce Jesús mío, mi Niño adorado, ven a nuestras almas, ven no tardes tanto”

Del 16 al 24 de diciembre, miles de feligreses colmarán las principales iglesias para esperar con mucho entusiasmo la llegada de la Navidad con las tradicionales Misas de Aguinaldos, conocidas como misas de Gallo una arraigada tradición venezolana que data de la época colonial.

"La celebración de estas eucaristías, que son ofrendadas a la Virgen María, forman parte de la herencia dejada por los misioneros españoles. Se efectúan durante el denominado Tiempo de Adviento, en el que sacerdotes, vestidos con sotanas blancas, y feligreses, realizan la lectura de la novena". “Las nueve misas de aguinaldos, que preceden a la Nochebuena, se celebran en honor a la Virgen y con la finalidad de prepararse para recibir a Jesús. Es un llamado a la transformación del Espíritu y a escuchar la palabra de Dios”.

¿Quién no ha amanecido en diciembre para esperar la misa de aguinaldos? Una hermosa tradición que reúne a familiares y amigos en la iglesia. Se acostumbra, también, acompañar las Misas de Aguinaldo con el ritmo de la parranda, villancicos y la gaita, aparte del compartir de la comida navideña y los fuegos artificiales, al final de la actividad.

Cuentan las diferentes historias que las nueve eucaristías representan los meses de gestación de la Virgen para traer al mundo a Jesús. Sin embargo, se trata de una tradición de la Iglesia oficiar una novena antes de las grandes fiestas. Pentecostés, Virgen Inmaculada o La Asunción son ejemplos de celebraciones con esa característica.

En ese período de tiempo se prepara el corazón y espíritu para ser el mejor pesebre en donde Jesús pueda nacer bajo un ambiente de unión. Las misas de aguinaldo se diferencian del resto por su alegría. Pese a enmarcarse en el tiempo de Adviento, identificado con el color morado en representación del recogimiento y la reflexión, la sobriedad se deja un poco de lado y se da paso al uso del blanco, digno de grandes celebraciones.

La aprobación de la introducción de cantos de parranda, acompañados de cuatro, tambor, furrucos, y charrasca a las misas motivaron el inicio de la novena de Navidad que cierra con la Misa de Gallo en Nochebuena.

Compilación con fines didácticos. Dra. Chirinos Eneida. 2012